Aristóteles nunca tomó café.
Platón nunca comió feijoada a la brasilera.
Alejandro nunca ordenó cuscús en Alejandría.
Cleopatra nunca vistió Dior.
Cesar nunca usó un Rolex de oro.
Brutus nunca disparó un revolver.
San Agustín nunca tomó lexotanil.
Carlo Magno nunca leyó a Freud.
Marco Polo nunca tomo un avión.
Lorenzo de Médicis nunca condujo un Ferrari.
Erasmo nunca simpatizó con Choucroute.
Lutero nunca hizo yoga.
Yo tampoco.
Nuno Júdice, poeta portugués (1949)
4 comentarios:
Miguel Cobo nunca me decepcionó.
Rigoletto
Te di pocas oportunidades, la mili sólo dejaba espacios y tiempos para la confraternización, tan solidarios en nuestra "miserable" condición soldadesca.
¿Qué te parece este descubrimiento "ibérico" de nuestra quinta?
Capitán Clostridium nunca navegó por un río. ¡Mentira! Da gusto navegar por su Riografía.
Me gusta este Nuno. Creo haber leído algo de él, no sé dónde. ¿T&al vez en el inquietante NoctambularioLlevas razón en una cosa: la mili no nos dejó ni decidir si nos caíamaos bien o mal. Fue una afinidad selectiva que después continuó en Jaén y treinta años después en la red. Es curioso. En cualquier caso, aquí me tienes riografiando.
Rigoletto
Rigoletto
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