viernes, 4 de febrero de 2011

Fragile





Frágil esta noche se quiebra y el frío
se filtra en mis huesos con su aura de adiós.
Las viejas canciones demoran el sueño
y cuelgan estrellas en la habitación. Las nubes
del alma se alejan despacio y esparcen al aire
su espuma de luz. No llegará al alba
esta duda helada que anuda en mi pecho
su cuerda vocal.
Abrázame fuerte, dulce compañera.
Surge la guitarra de Sting en la niebla:
Fragile es el eco de mi corazón.


                          ***

Miguel Cobo Rosa

6 comentarios:

Alberto Granados dijo...

Esa frgilidad de todo lo que es humano... Pesimismo barroco destila tu poema, Miguel. La vida duele, pero es tan hermosa...

Marisa dijo...

Las viejas canciones demoran el sueño porque guardan en sus acordes notas graves y lejanas del eco de plácidos recuerdos que nos visitan por la espalda con su fragilidad.
Bello, Miguel.
Besos frágiles aunque no vulnerables.

Kaperusita dijo...

La perpetua lucha por seguir, por estar, por ser, por no desvanecerse en la nada.
Muy emotivo, Miguel:)

Miguel Cobo dijo...

Alberto, ya lo dijo otro Miguel: "...y estoy a gusto en mi herida".

***

Marisa, las canciones (la música en general) son inherentes a los recuerdos y disparan la creatividad, al tiempo que generan nuevos estados de ánimo; pero siempre bajo el denominador común de la emoción, del sentimiento.
Gracias y besos tan frágiles como humanos.

***

Kaperusita, has descifrado con gran sensibilidad y precisión las claves del lenguaje poético. Creo que hemos ganado definitivamente una gran lectora de poesía.

Emoción compartida, amiga.

Alejandra Díaz dijo...

Las viejas canciones siempre demoran los sueños, querido Miguel... Espléndido.

Besos

Miguel Cobo dijo...

Los sueños y las canciones se retroalimentan: Una canción para un sueño y viceversa. Y las palabras para traducirlos.
Gracias, Alejandra.