Cuando vuelas de noche
el mundo está al revés
y el suelo
es el cielo.
Las luces de la ciudad
se convierten en estrellas,
toda una nube de constelaciones
a nuestros pies,
a miles de pies de altura
luces con vida propia.
Los coches en tierra
o los barcos en el mar
son un infinito baile
de estrellas fugaces.
Aprovecha,
pide un deseo
antes de que amanezca.
Alfonso Carlos Cobo Espejo
13 comentarios:
Pido un deseo.
Rodolfo: Que se cumpla.
En el corazón del solitario todo es posible, hasta que se hiele el infierno.
¿Un deseo? Pedido queda ;-)
Estrellas a ras de suelo y deseos fugaces en el cielo. El universo es tu alma, Kape. No todos, pero algún deseo te será concedido.
Besos.
En la noche muchas estrellas van a vivir en la ciudades. Entonces pido algún deseo.
Lo bueno es que todavía no ha amenecido, aún queda la noche eterna del poema. Desear, desear.
Un abrazo grande!
Francisco, incluso hay gente que nace con estrella. Si es así, todos sus deseos se cumplen. ¿Es tu caso?
***
Joaquín, elegí este poema de mi hijo, afluente de consaguinidad riográfica, y sus deseos se han colmado de estrellas. A ver si las divisa en el cielo de Hanoi.
Un abrazo, poeta.
Vaya, tal es el padre, tal es el hijo. De casta le viene. Muy bien. Mis felictaciones para el hijo y mis solidarios baberos para el padre.
Alberto
No se puede negar que es una poesía "de altura" la de Alfonso, al menos estos versos escritos en el avión. Y lo de los baberos se agradece; casi nos vienen bien ya para todo, je je, en esta edad provecta, amigo Alberto.
Un abrazo, joven. (¿Quitamos la coma?)
Un deseo,un sueño.Qué bonito,cómo debes gozar Miguel.Saludos a los dos,Marifé
Marifé, qué dura sería la vida sin sueños ni deseos.
Besos y saludos correspondidos
Esta noche, pediré tres. Mi deseo será que se cumpla alguno. Ya sabes, cálculo de probabilidades... ;)
Bexos
Si soñar es vivir..tocar las estrellas, el infinto cielo, la luna, realmente bello.
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